El nomadismo digital se considera un proceso socioeconómico y laboral nacido en el siglo XXI. Un nómada digital es la persona que usa tecnología para trabajar, y que lo hace en constante movimiento, sin necesidad de estar siempre en una oficina o cumpliendo horarios. El término nómada del conocimiento, viene del neologismo inglés knowmad, que combina las palabras know (conocer, saber) y nomad (nómada), y que da cuenta del perfil del sujeto capaz de ser un nómada digital. Por su aporte al mundo del conocimiento y la innovación este concepto empieza a escucharse en ámbitos empresariales dado que refiere a las competencias que deberá tener un trabajador en el contexto actual y futuro.
La definición fue creada en el año 2011 por el experto en mercado laboral John Moravec, fundador de Education Futures, para definir a los trabajadores nómadas del conocimiento y de la innovación. Knowmad hace referencia a un nuevo perfil de profesional que ha de ser principalmente innovador, imaginativo, creativo, capaz de trabajar en colaboración con casi cualquier persona, en cualquier momento y lugar. Un knowmad es valorado por su conocimiento personal, lo que le proporciona una ventaja competitiva con respecto a otros trabajadores menos adaptados al entorno. Además debe ser autodidacta en esta sociedad 2.0 nutriéndose y aprovechando el potencial del conocimiento proveniente de internet y de las nuevas tecnologías, principalmente digitales.
Cuando Moravec hace referencia a los profesionales en modalidad nómada, también refiere a la manera en que dichas personas se capacitan, adoptan competencias y conocimiento acorde a los empleos del futuro, están en constante capacitación. Hablamos de personas que desarrollan su carrera profesional en áreas como el periodismo, la programación de sistemas, diseño web, diseño gráfico, traducción. Todas aquellas que pueden desempeñar desde una notebook con una buena conexión a Internet.
Actualmente varias empresas tienen un buen % de su staff trabajando de manera deslocalizada ( desde ciudades donde las empresas ni siquiera tienen una oficina). Sumado a que a veces, el 100% de sus clientes también se encuentra fuera de las ciudades — y países — donde se encuentras alocadas. No podría esperarse menos de los profesionales que desarrollan dichas tareas. En algunos casos (especialmente aquellas que desarrollan servicios en torno a la tecnología) es factible hasta un 100% de su planta estable, trabajando de esa manera.
De manera multigeneracional, los knowmads buscan la libertad que la conectividad les da, para no depender de un lugar para desempeñar su tarea diaria. A la vez, es posible que no la entienda como un “trabajo”, elige lo que le gusta hacer y lo lleva adelante como parte de su vida.
Al contrario que el millenial (nacido entre 1981 y 1995), el knowmad no tiene edad, cualquier persona está capacitada para tener mentalidad nómada.
Las empresas no pueden perder a los mejores talentos, por no amoldarse con esta situación.
Según algunos expertos el 45% de la fuerza laboral en 2020 estará formada por knowmads y las empresas y la legislación laboral en los diferentes países tendrán que adaptarse para darles cabida y cobertura.
¿Cómo los buscamos? ¿Cómo los atraemos hacia nuestros proyectos? ¿Cómo nos amoldamos a esa realidad?
En la lucha por la incorporación y retención de talento innovador se han desarrollado programas para atraer a los mejores profesionales en la industria de la tecnología e innovación digital dado que dichas personas muchas veces han optado por una movilidad continua como modo de vida. Para adaptarse, hay que adaptar las políticas de gestión de RRHH pero también la gestión de equipos, tiempos, y ofertas. La oferta laboral paquetizada ya no será valorada. Las diferencias horarias, el estar en diferentes usos horarios en tanto avanzan las semanas, son desafíos. Las organizaciones lo lograrán si re-diseñan su estrategia ( también) de una manera innovadora, imaginativa, y creativa. Siempre teniendo el ojo sobre lo normativo y legal.
Las ciudades son anfitrionas de los nómades digitales
Las ciudades tienen la gran oportunidad de atraer este tipo de talento a sus territorios. Deberán ofrecerles Internet inalámbrico (preferentemente gratuito), tarifas accesibles de alojamiento, lugar apto para el trabajo (fuera de su alojamiento preferentemente, rodeado de pares), atracciones locales de fácil acceso para congeniar las horas donde no se trabaja con el placer, conectividad ( aérea, terrestre, etc) y una buena oferta diseñada para ellos.
El sitio https://nomadlist.com/ presenta una lista de mas de 1200 ciudades alrededor del mundo, de las cuales analizan casi 100.000 datos provistos por los mismos usuarios, que permiten obtener una calificación de la ciudad, para el modo de vida del nómade digital.
La era Co
Raquel Roca, periodista, consultora digital y autora del libro “#Knowmads Los trabajadores del futuro” afirma que
El #knowmad es un profesional generoso: sabe que cooperar es más eficaz que competir
En su presentación en un evento reciente, ella refiere a la era del Knowmad como la “era Co”, haciendo hincapié en la comunidad, la economía colaborativa que este tipo de profesionales deslocalizados buscarán tanto en la empresa que los contrate, como en la ciudad que visiten.
Flexibilidad, Colaboración, Agilidad, Transparencia, Humanidad, trabajo en Red.
Conceptos como Coworking, CoLiving, Red comienzan a tomar un protagonismo que el viajero ya nos reclama como sociedad.
En ciudades turísticas del mundo (desde las grandes ciudades a las aldeas de montaña) los nómades ya llegaron, y en este mismo momento están buscando un lugar donde sentarse con su notebook, a trabajar mientras ya planean una excursión cercana, que les permitirá conocer la belleza de esa ciudad.
Nuestro desafío es … recibirlos y brindarles el entorno necesario para ello.